Manifestación por la libertad del pueblo saharaui
La muerte de Mahmoud Gargar Babba incinerado y el asesinato de Baby Buyema cometido por la Policía marroquí en Al Aauin aumenta la tensión entre España y Marruecos. El joven ingeniero eléctrico trabajaba desde hace nueve años en la capital del Sahara Occidental y había obtenido la nacionalidad española hace escasos días. Según su hermanastro, los agentes "le pasaron con el coche dos veces por encima" y lo dejó tirado, aún vivo, en el suelo. Este último suceso no hace más que aumentar las dudas sobre la legalidad de los actos de los soldados marroquíes en el Sahara Occidental. Un pueblo que vive sin identidad propia y que en estos últimos días ha sufrido la censura, represión, maltrato y todo tipo de vejaciones por parte de Marruecos. Los activistas que estuvieron en el campamento 'Gdeim Izik' de protesta por las condiciones de vida saharaui, han denunciado todo tipo de palizas indiscriminadas y la impasividad del ejecutivo español. Mientras tanto el gobierno sigue sin saber como reaccionar ante estos hechos que atentan contra los derechos fundamentales de la persona, ya que el último comunicado "conjunto" de condena a Marruecos no fue aprobado por discrepancias. Es hora de que España reaccione ante este tipo de situación y defienda los intereses del pueblo saharaui, pero sobretodo que les den la libertad de ser personas.
La foto publicada por la agencia EFE consigue que nos involucremos de lleno en la difícil situación del pueblo saharaui y nos muestra la brutalidad de los soldados marroquíes. Estamos ante una imagen fija con tonos oscuros que muestran suciedad y sufrimiento. Encuadrada en el rostro maltrecho de Mahmoud Gargar Babba, rodeado de trapos y mantas. El cuerpo incide en líneas inclinadas, denotando la muerte del sujeto en cuestión.
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